VIAJE A TIERRA SANTA: Palestina no es lugar para mujeres solas. Nazareth.

Cartel a la entrada de una tienda de souvenirs en Jericó

"Un lugar que no es país. Un montón de mapas confusos que ocultan unos lugares y renombran otros. Una población heterogénea que, cuanto más crece, menos espacio tiene para vivir, amontonándose en núcleos improvisados y cercados por un muro que se expande...Esto es Palestina"

Manifestación en Nazareth

No he encontrado un solo viaje organizado a Tierra Santa que conceda tiempo libre, cada día, a sus viajeros. Todos realizan circuitos extenuantes de la mañana a la noche que no permiten regresar al hotel almediodía. No existe ninguna entrada Google para "viaje/Tierra Santa/tranquilo/sin prisas".

NAZARETH

Se ha convertido en el mayor pueblo árabe de Israel con 60.000 habitantes. La ciudad consiguió salir indemne de la guerra y en poco tiempo duplicó su población con los refugiados de poblaciones vecinas.

Nazareth

El asentamiento judío Nazareth Illit, creado en 1950, tiene un poco más de la mitad de la población de Nazareth pero casi cuatro veces más tierra. En este asentamiento se ha creado una extensa zona industrial que proporciona empleo y que genera un importante ritmo de negocios a la ciudad.

Sin embargo, el Nazareth árabe solo cuenta con dos diminutas zonas industriales: una docena de carpinterías privadas en la Ciudad Vieja y una “zona de talleres” de reparación de coches. Dicho esto, Nazareth tiene unos pocos privilegios que no se le han concedido a ninguna otra comunidad árabe en Israel, la mayoría de los cuales se deben a su importancia histórica.

A consecuencia de ello, ha emergido una clase media palestina que hace alarde de su riqueza (la no menos importante de la cual es su elección de coches de lujo que circulan por el centro de la ciudad) y que a menudo oculta a los visitantes la terrible pobreza de sus barrios periféricos.
http://www.rebelion.org/noticia.php?id=155467

El turista es transportado a toda velocidad de la Basílica de la Anunciación a la Iglesia de San José y de allí a la Fuente de María... apenas veinte minutos en el zoco de Nazareth mientras se realiza el recorrido.
La impresión que queda de Nazareth, desde el autobús, es la de una ciudad urbanísticamente destrozada y sucia. En sus calles pasean jóvenes con los últimos modelos de móviles, Audis y BMWs entre amasijos de cables, hierros, basura y casas a medioconstruir. Y, sin embargo, la ciudad sigue milagrosamente viva.
En los días siguientes, el autobús te desplaza a las 7 de la mañana desde Nazareth al monte Tabor, lago Tiberiades, Cafarnaúm, monte de las Bienaventuranzas, monasterio de Jabel Quruntul, Jericó y Mar Muerto... Este recorrido se realiza en apenas dos días y, a las 7 de la tarde de cada uno de ellos, el autobús descarga frente al hotel de turno a un centenar de turistas derrengados que ya no saben lo que han visto ni tienen fuerzas para preguntar lo que les queda aún por ver.

Hermosos edificios abandonados junto Iglesia de la Anunciación

Zoco en la ciudad antigua de Nazareth

Atardecer en Nazareth: la vida en la calle.

Desastre urbanístico en la ciudad vieja

Egeria (siglo IV) no escribió sobre Nazareth. Puede que no pasara por allí o puede que la ciudad todavía no existiese como tal (siglo IV). Tampoco el "Peregrino de Burdeos" (333 d.C.) la nombra. La primera referencia de Nazareth aparece en el Itinerario del Pseudo Antonino de Piazencia:
"(...) la casa de Santa María es ahora una iglesia (la de la Anunciación) y, al contacto con sus ropas, suceden allí muchos milagros. Verdaderamente el encanto de las mujeres hebreas de esta ciudad es tan grande que no se pueden encontrar mujeres mas bellas, y dicen que se lo ha concedido Santa María, pues la consideran parienta suya. Y, mientras que los hebreos no tienen ningún amor a los cristianos, ellas están realmente llenas de un amor completo(?). La provincia es como un paraíso; es semejante a Egipto en trigo y frutos, aunque lo aventaja en vino, aceite y frutas. Su mijo es extremadamente alto y de tallos gruesos. Supera la estatura de un hombre" Itinerarios latinos a Jerusalén y al oriente cristiano, de Carmen Arias Abellan

PROXIMA ENTRADA: Belén, una ciudad entremuros